viernes, 29 de diciembre de 2023

Charles Dickens y las mujeres del Urania College



"Concéntrate en todo lo bueno que te pasa, que a todos nos pasa mucho; y no en las desgracias, que a todos nos pasa alguna".

***

En 1842, después del regreso del prolífico escritor a Inglaterra y su triunfal gira por los Estados Unidos, la desgracia y el hambre se afincaron en su país. El precio del pan se duplicaba debido a las malas cosechas, y la pobreza se infiltraba en las ciudades, abrumadas por campesinos en busca de una pequeña caridad. 

La industria algodonera, antaño orgullo de Inglaterra, atravesaba una pronunciada decadencia, generando largas filas en las casas y comedores de caridad en las calles de cualquier ciudad del país.


Dickens, defensor declarado de las libertades civiles y religiosas, así como de los derechos humanos, se horrorizaba ante el creciente odio de clases. El ciclo comenzaba con el cierre de fábricas, desencadenando huelgas que, rápidamente, se tornaban violentas y culminaban con el envío de tropas para sofocarlas.

En medio de los llamados "Hambrientos Cuarenta", la prostitución femenina emergía como una de las realidades más distintivas de la época.

La señora Angela Burdett-Coutts, adinerada y filantrópica solterona, ferviente lectora de Charles Dickens, se convirtió en la principal financiera del Urania College. Dickens le propuso la idea de financiar una entidad que ayudara de alguna manera a rehacer la vida de estas mujeres, llevadas a la prostitución por una imperante necesidad.


La señora Angela abrazó entusiasmada la propuesta de Dickens, convirtiéndose así en la principal benefactora del Urania College. Insistió en que el respetado novelista se pusiera al frente de la institución.

Urania, era un refugio para mujeres caídas, concebido y parcialmente financiado por el propio Dickens, quien lo dirigió con dedicación durante casi quince años. 


El proceso de admisión requería que la aspirante hiciera a Dickens un detallado relato de su desgracia. Esta confesión se realizaba una sola vez, y a partir de entonces, la mujer se comprometía a guardar silencio absoluto sobre su pasado. Ni el personal ni las compañeras del instituto debían conocer las circunstancias de su vida. El silencio se extendía incluso a sus vidas futuras.

Contar por única vez sus desventuras, guardar silencio para siempre, adquirir habilidades domésticas, viajar a algún rincón del Imperio, encontrar un buen hombre, casarse y tener hijos; era el programa de Urania, algo similar al guion de un melodrama de cine con final feliz.


El propio Dickens, con un interés aparentemente terapéutico, realizaba la única entrevista con las aspirantes. Fundador de la institución y de mentalidad freudiana, Dickens exigía que las mujeres llevaran una nueva vida orientada a recuperar el decoro, aprender oficios y destrezas hogareñas. Llevaba un meticuloso registro de entrevistas, así como del desempeño y los progresos de las pupilas en un volumen característicamente llamado "Libro de Casos", que solo él pudo leer.

Alrededor de cien mujeres pasaron por Urania durante los quince años en que sirvió como "refugio societario", según el término de Dickens. Un informe de 1853 detalla que 26 de las primeras 54 pupilas emigraron a Australia y lograron reconstruir con éxito sus vidas. Catorce decidieron abandonar Urania y otras diez fueron expulsadas.


Emma tenía quince años cuando solicitó ingresar en Urania. Antes de prostituirse, vivió una verdadera odisea como obrera infantil en la fábrica de betún donde, aún siendo niño, Dickens había trabajado incansablemente para mantener a su padre encarcelado por deudas. La coincidencia impactó profundamente al autor de "Historia de dos ciudades", generando una especial empatía por Emma, a quien cuidó con esmero durante toda su vida.

La fábrica, conocida como Warren's Blacking Factory, estaba ubicada en la orilla del río Támesis, cerca de la estación de Charing Cross de Londres. Dickens tenía 12 años cuando comenzó a trabajar allí en 1824. Las condiciones de trabajo eran extremadamente duras: 10 horas al día, seis días a la semana, por un salario de 6 peniques diarios. Su trabajo consistía en pegar etiquetas en los botes de betún, una tarea repetitiva y monótona.

Dickens detestaba su labor en la fábrica, considerándola una humillación y sintiéndose prisionero. En una carta a su amigo John Forster, expresó:

"Mi trabajo era pegar etiquetas en botes de betún. Era agotador y miserable, rodeado de niños tan desafortunados como yo".


La experiencia de Dickens en la fábrica dejó una profunda huella en su vida y obra. Novelas como "Oliver Twist" y "David Copperfield" exploran temas como la pobreza, la desigualdad social y la injusticia.

La visita de Elizabeth Gaskell a Urania Cottage en 1852 aumentó la visibilidad de la residencia. Gaskell, amiga de Dickens y novelista destacada, elogió el trabajo realizado en Urania Cottage en una carta al propio Dickens. Su respaldo contribuyó a su creciente popularidad.

Urania Cottage cerró en 1858, pero su legado perdura. Ayudó a cambiar la percepción de las mujeres jóvenes que habían sido prostitutas, demostrando que podían transformar sus vidas y encontrar un futuro mejor.

¡Un brindis por el señor Dickens!

sábado, 23 de diciembre de 2023

Esa noche en la que Vincent Van Gogh se deshizo de su oreja

 


"Puse mi corazón y mi alma en mi trabajo, 
y he perdido mi mente en el proceso".

En una noche como la de hoy, hace 135 años; es decir, en la noche del 23 de diciembre de 1888, sucedió que Vincent Van Gogh entregó su oreja a una mujer en un burdel local llamada Rachel. Al día siguiente, el 25 de diciembre, la policía fue alertada por el propietario del burdel y encontraron a Van Gogh en su casa, gravemente herido.

La oreja cortada fue recuperada del lugar donde Van Gogh la dejó y se dice que fue entregada a un médico llamado Félix Rey, quien trató al pintor después del incidente. Este trágico episodio es parte de la compleja biografía de Vincent van Gogh y ha suscitado mucho interés y debate a lo largo de los años.


Las circunstancias exactas de lo que sucedió esa noche siguen siendo un misterio. La versión más aceptada es que Van Gogh se cortó la oreja a sí mismo después de una discusión con su amigo y colega, Paul Gauguin. Los dos artistas habían estado viviendo juntos en la Casa Amarilla de Arles, Francia, durante varios meses, y su relación se había vuelto cada vez más tensa.


La noche del 23 de diciembre, Van Gogh y Gauguin tuvieron una discusión particularmente acalorada. Gauguin se fue de la Casa Amarilla y Van Gogh quedó solo, angustiado y enojado. Es posible que haya experimentado alucinaciones o delirios, o que haya sufrido un ataque de epilepsia, que era una condición médica que sufría, aunque también existiese la posibilidad de que se hubiese puesto de absenta hasta el cogote.

A la mañana siguiente, Gauguin regresó a la Casa Amarilla y encontró a Van Gogh inconsciente en su cama. Van Gogh fue llevado al hospital, donde recibió tratamiento por su herida. La oreja de Van Gogh nunca se encontró. Algunos creen que fue enterrada en el jardín de la Casa Amarilla, mientras que otros creen que fue arrojada al río Ródano.


"El arte es para consolar a los que están quebrantados por la vida".

El acto de Van Gogh de cortarse la oreja fue un evento traumático que tuvo un profundo impacto en su vida y obra. Se cree que el incidente contribuyó a su deterioro mental, que finalmente lo llevó a suicidarse en 1890.

La mañana después de cortarse la oreja, Van Gogh escribió una carta a su hermano Theo. En la carta, Van Gogh describe lo que sucedió la noche anterior. Esta carta es una fuente importante de información sobre lo que sucedió la noche de la oreja cortada. La carta muestra que Van Gogh estaba muy angustiado y que no estaba en control de sus acciones.


En 2002, una periodista francesa llamada Martine Gosset afirmó haber encontrado la oreja de Van Gogh. Gosset dijo que había recibido la oreja de un hombre que se presentó como un descendiente de la prostituta Rachel, a quien Van Gogh le había regalado la oreja.

Sin embargo, la autenticidad de la oreja encontrada por Gosset fue rápidamente cuestionada. Los expertos en arte dudaban de que la oreja fuera la de Van Gogh, ya que estaba en un estado de conservación demasiado bueno. Además, la historia del hombre que la había encontrado era poco creíble.

En 2003, el Museo Van Gogh de Ámsterdam realizó una investigación sobre la oreja encontrada por Gosset. Los expertos del museo examinaron la oreja y concluyeron que no era la de Van Gogh. La oreja era demasiado pequeña y tenía la forma incorrecta. Además, la oreja estaba hecha de cera, no de carne. Por lo tanto, continuamos con el misterio…

miércoles, 20 de diciembre de 2023

El Cascanueces y el Rey de los Ratones, algo más que una simple historia


E.T.A. Hoffmann, cuyo nombre completo es Ernst Theodor Amadeus Hoffmann, fue ciertamente una figura peculiar y fascinante del romanticismo alemán. Además de ser un escritor, también fue jurista, dibujante y compositor musical. Su vida estuvo marcada por una mezcla de creatividad, imaginación, y también por momentos de desafíos personales.

Ya hicimos referencia en el blog con «El hombre de arena», uno de los cuentos más enigmáticos y terroríficos, por qué no decirlo, del autor. 

Hoffmann tenía una inclinación por lo fantástico y lo surrealista en sus obras literarias, y su imaginación única le valió reconocimiento en el ámbito literario. Al mismo tiempo, enfrentó luchas personales, incluyendo problemas de salud y desafíos en su carrera legal.


En cuanto a su interés por los autómatas y la mecánica, refleja su fascinación por la intersección entre lo humano y lo artificial, un tema que aparece en muchas de sus obras. Aunque puede parecer extraño desde nuestra perspectiva contemporánea, este tipo de intereses eran relativamente comunes en la Europa del siglo XIX, especialmente entre los románticos, que a menudo exploraban los límites de la realidad y la imaginación.

Resumiendo, Hoffmann fue, de hecho, una figura multifacética y única en la historia literaria y artística.

«El Cascanueces y el Rey de los Ratones» es una obra clásica escrita por E.T.A. Hoffmann. Este cuento fue publicado por primera vez en 1816 como parte de la colección de Hoffmann titulada «Cuentos nocturnos para niños». La historia ha ganado popularidad y es conocida principalmente por haber inspirado el famoso ballet «El Cascanueces» de Piotr Ilich Chaikovski.


La trama del cuento habla de Clara, una niña que recibe un cascanueces como regalo en la víspera de Navidad. Durante la noche, el cascanueces cobra vida y se enfrenta al malvado Rey de los Ratones. Después de la batalla, el cascanueces se transforma en un príncipe y lleva a Clara a un reino mágico lleno de dulces y juguetes.

Hoffmann, logra combinar la inocencia de un cuento de hadas con elementos más siniestros y oníricos. 

La adaptación de Chaikovski para el ballet, estrenada en 1892, contribuyó significativamente a la popularidad de la historia, convirtiéndola en una obra clásica de la literatura infantil y la música clásica.


«El Cascanueces y el Rey de los Ratones» es un cuento que ha sido interpretado de diversas maneras a lo largo del tiempo, y su simbología puede variar según las interpretaciones. Pero vamos a mojarnos un poco… aquí os dejo algunas de las posibles interpretaciones y simbolismos asociados con la historia:

El viaje del héroe: La historia sigue el patrón clásico del «viaje del héroe», donde Clara se embarca en una aventura que la lleva a enfrentarse a desafíos, superar obstáculos y regresar transformada. Este viaje puede simbolizar el proceso de iniciación, maduración y autodescubrimiento.

Dualidad entre el bien y el mal: La lucha entre el Cascanueces y el Rey de los Ratones puede representar la dualidad del bien y el mal. La transformación del Cascanueces después de la batalla sugiere la victoria del bien sobre el mal.

El poder del imaginario: La visita de Clara al reino mágico después de la batalla puede interpretarse como un escape, una salida a un mundo de la imaginación y la fantasía. Este reino simboliza la capacidad de la mente humana para crear mundos maravillosos y escapar de la realidad.

El paso de la infancia a la madurez: El cuento puede considerarse como una alegoría del paso de la infancia a la madurez. Clara, al enfrentarse a desafíos y descubrir un mundo mágico, representa el crecimiento y la transición hacia el discernimiento.

El poder transformador de la fantasía: La capacidad del Cascanueces para transformarse de un simple muñeco en un príncipe simboliza el poder transformador de la fantasía y la imaginación, mostrando cómo estas pueden cambiar nuestra percepción de la realidad.

El subconsciente y los sueños: La historia se desarrolla en gran medida en un mundo de sueños y fantasía, sugiriendo la importancia del subconsciente y los sueños en la vida psicológica. La batalla entre el Cascanueces y el Rey de los Ratones, así como la posterior visita al Reino de los Dulces, podrían simbolizar la lucha entre las fuerzas del subconsciente y la búsqueda de la realización personal a través de los sueños.

La transformación y el desarrollo personal: La transformación del Cascanueces en un príncipe después de la batalla podría representar procesos de cambio y desarrollo personal. Este elemento podría sugerir que a través de la confrontación de los miedos (representados por el Rey de los Ratones), uno puede experimentar un crecimiento personal y transformarse en una versión mejorada de sí mismo.

El contraste entre la realidad y la fantasía: La historia también puede explorar la relación entre la realidad y la fantasía, sugiriendo que la mente humana tiene la capacidad de escapar de la realidad a través de la imaginación y los sueños. Este contraste podría reflejar la dualidad de la mente humana y cómo las personas a menudo buscan refugio en la fantasía para lidiar con las complejidades de la vida.

La dualidad de las emociones: La dualidad entre el Rey de los Ratones y el Cascanueces también podría interpretarse como la representación simbólica de las emociones humanas. La batalla podría simbolizar la lucha interna entre emociones negativas y positivas, y la victoria del Cascanueces podría sugerir la capacidad de superar las emociones destructivas.


El ballet «El Cascanueces» fue encargado por el director de los Teatros Imperiales de San Petersburgo, Ivan Vsevolozhsky, al compositor Piotr Ilich Chaikovski. Chaikovski, inicialmente, no estaba muy entusiasmado con la idea y consideró que la historia era demasiado infantil. Además, el ballet no fue inicialmente bien recibido por el público y la crítica.

La ironía reside en que hoy en día «El Cascanueces» es uno de los ballets más populares y ejecutados del mundo, especialmente durante la temporada navideña. La suite orquestal derivada del ballet, que incluye la famosa «Danza del Hada de Azúcar», es ampliamente conocida y apreciada.


La transformación de la percepción de «El Cascanueces» de un proyecto inicialmente despreciado a una obra maestra atemporal destaca cómo la apreciación del arte puede evolucionar con el tiempo y cómo una obra que puede no ser comprendida o apreciada en un momento dado puede convertirse en un clásico duradero.

Otra anécdota interesante relacionada con «El Cascanueces» está vinculada a la propia vida del autor del cuento original, E.T.A. Hoffmann.

Hoffmann era un apasionado por los juguetes y la mecánica, y su fascinación por las marionetas y autómatas se refleja en la historia.

En su vida cotidiana, E.T.A. Hoffmann tenía un interés especial en construir y coleccionar autómatas, figuras mecánicas que imitaban movimientos humanos. Se dice que incluso incorporó algunos de estos autómatas en sus lecturas y eventos literarios, creando un ambiente único y fantástico para sus espectadores.

Esta conexión entre la vida personal del autor y su obra resalta cómo Hoffmann incorporó sus propias pasiones e intereses en sus creaciones literarias, dando una dimensión adicional a la historia del Cascanueces y su mundo mágico.

lunes, 11 de diciembre de 2023

Hansel y Gretel o la trama del abandono.



Hoy toca sumergirnos en el mundo de los hermanos Grimm. Concretamente en el cuento «Hansel y Gretel», que fue recopilado y publicado, en su famosa colección de cuentos de hadas titulada; «Cuentos de la infancia y del hogar». 

La primera edición de esta colección fue publicada en dos volúmenes, el primero en 1812 y el segundo en 1815. Sin embargo, «Hansel y Gretel» fue incluido en la segunda edición revisada, que se publicó en 1819. La colección experimentó varias ediciones y revisado a lo largo de los años, pero la versión que conocemos hoy en día es en gran medida la que fue publicada en la séptima edición en 1857.


La trama de cuento, nos relata a dos hermanos que son abandonados en el bosque por sus padres debido a la escasez de alimentos. En su intento de regresar a casa, Hansel utiliza migas de pan para marcar el camino. Sin embargo, las migas son devoradas por los pájaros y los niños se desorientan y pierden.

Tras vagar por el bosque, al fin encuentran una casa construidas con golosinas y dulces. Hambrientos, comienzan a comérsela sin darse cuenta de que la casa pertenece a una bruja malvada. La bruja los captura y los mantiene prisioneros con la intención de comérselos.

Gretel, astuta, engaña a la bruja y logra liberar a su hermano. Juntos, consiguen empujar a la bruja dentro de su propio horno, y de esa manera lograrán escapar. Después de derrotar a la bruja, encuentran una fortuna en el interior de la casa de la bruja. Al regresar a su hogar, descubren que su madre ya ha fallecido. Con su padre, ahora arrepentido, viven felices con las riquezas que encontraron en la casa de la bruja.


Dentro del ámbito de la psicología moderna, se podrían interpretar diversos análisis sobre los cuentos de hadas, incluyendo «Hansel y Gretel». Aunque es importante destacar que estas interpretaciones son subjetivas y pueden variar según el enfoque teórico y el punto de vista del analista. 

El síndrome del niño abandonado es una condición de comportamiento o psicológica que resulta principalmente del abandono del niño por parte de los padres de una manera voluntaria o por la pérdida de uno o ambos padres. El abandono puede ser físico (el padre/madre no está presente en la vida del niño) o emocional (el padre/madre retiene afecto, nutrición o estimulación)

Para algunos niños el abandono es principalmente físico. El abandono físico ocurre cuando las condiciones físicas necesarias para prosperar han sido reemplazadas por:

Carencia de supervisión apropiada.

Provisión inadecuada de nutrición y comidas.

Ropa inadecuada, vivienda, calor, o refugio.

Abuso físico y/o sexual.

Verbal y/o abuso emocional (avergonzamiento, rechazo).

Negligencia

Algunos psicólogos y expertos, como Gustav Jung, han sugerido conexiones entre elementos de los cuentos de hadas y ciertos aspectos psicológicos. Aquí hay algunas interpretaciones posibles desde diferentes perspectivas:

Desarrollo Infantil:

Desde una perspectiva del desarrollo infantil, el cuento podría abordar temas como la separación de los padres (abandono en el bosque), la lucha por la supervivencia y la resiliencia de los niños ante situaciones difíciles.

Algunos elementos pueden interpretarse simbólicamente. La casa de dulces podría representar deseos y placeres tentadores, mientras que la bruja podría simbolizar amenazas o conflictos inconscientes.

También se podría analizar la dinámica familiar, especialmente el acto de los padres al abandonar a los niños y cómo esto puede influir en la percepción de la seguridad y la confianza en las relaciones familiares.

Desde una perspectiva más general, el cuento también podría abordar el tema del miedo y cómo los niños enfrentan y superan situaciones aterradoras. Además, el proceso de aprendizaje y la toma de decisiones por parte de Hansel y Gretel son aspectos que podrían analizarse en términos de desarrollo cognitivo y emocional.


Bruno Bettelheim, en su obra «Psicoanálisis de los cuentos de hadas», ofrece un enfoque psicoanalítico para analizar los cuentos de hadas, incluyendo «Hansel y Gretel». Aquí hay algunos aspectos clave de su interpretación:

Bettelheim argumenta que los cuentos de hadas no solo son entretenimientos infantiles, sino que también desempeñan un papel crucial en el desarrollo psicológico de los niños. Él sostiene que los elementos simbólicos de los cuentos de hadas ofrecen a los niños una manera de comprender y procesar sus propias emociones y experiencias.

Bettelheim considera a Hansel y Gretel como arquetipos que representan aspectos universales de la experiencia humana. Por ejemplo, interpreta la casa de dulces como un símbolo del deseo y la satisfacción inmediata, mientras que la bruja representa la figura materna malévola o autoridad opresiva.

La casa de los pasteles:

Representa las tentaciones y placeres efímeros de la vida. Puede interpretarse como un cebo utilizado por el malvado brujo para atraer a los niños.

La atracción hacia lo dulce y apetitoso puede reflejar la búsqueda de placer instantáneo y gratificación, a menudo presente en la infancia.


Las migas de pan:

Originalmente, las migajas de pan sirven como marcadores para que Hansel y Gretel encuentren su camino de regreso. Sin embargo, también pueden simbolizar la fragilidad de la seguridad y la confianza ante un entorno peligroso. Las migajas pueden representar la vulnerabilidad y la necesidad de tener una guía constante en la vida, especialmente en situaciones desconocidas.

La bruja:

Puede interpretarse como un arquetipo de la figura materna malévola o la amenaza desconocida en la vida de los niños. La figura de la bruja puede representar los miedos infantiles hacia las figuras de autoridad o la pérdida de inocencia. También puedes explorarse desde una perspectiva de lucha entre el bien y el mal dentro de la psique infantil.

sábado, 2 de diciembre de 2023

Abrir los ojos

 


«Y cuando estés cerca yo tomaré tus ojos, y los pondré en lugar de los míos. Y tú tomaras mis ojos, y los pondrás en el lugar de los tuyos. Y entonces, yo te miraré a ti con tus ojos y tú me mirarás con los míos».

J. Moreno


Abrir los ojos y mirar. percibir cuánto nos rodea, a ser posible ofertando algo de ternura.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos a la emoción, a lo más sencillo de todo, a lo más simple.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos e intentar concebir el latido de las cosas ¡Cuanta ilusión va puesta en ello!

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos ante los que se agitan a tu lado, y que ahora no pasan a ser más que sombras.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos y oír cuanto no se dice, ese silencio que habla por sí solo.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos a la oscuridad, los colores y también las esquinas.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos para descubrir justo lo necesario y prescindir del resto.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos sin juicios de ningún tipo.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

Abrir los ojos para poder mirar al otro.

Mirar sin ver, ver sin mirar.

«Dejar que los ojos hagan su trabajo de mirar
y… permitirse uno ser su propio novelista».

Fritz Perls.

lunes, 27 de noviembre de 2023

Marc Chagall y el violinista sobre el tejado



El pintor Marc Chagall inmortalizó a su tío Neuch en un retrato, situándolo con su violín sobre el tejado de su casa. Chagall pintó a su tío en varias ocasiones y durante su infancia, en Vitebsk, tuvo la oportunidad de escuchar a menudo a su tío tocar el violín. El sonido envolvía su mundo infantil, y esto se refleja en la frecuencia con la que este personaje aparece en sus obras.

«Cada sábado, tío Neuch se ponía un taled cualquiera y leía la Biblia en voz alta. Tocaba el violín, como un zapatero. El abuelo le escuchaba y soñaba. Tan solo Rembrandt hubiera sabido lo que pensaba el viejo abuelo, carnicero, comerciante, cantor, mientras su hijo tocaba el violín en la ventana, delante de los cristales sucios, recubiertos de gotas de lluvia y huellas de dedos».

Marc Chagall


Su tío Neuch. aparece en «El violinista verde» (1923), «Músico con violín» (1919), «La boda» (1944), «El violinista azul» (1947), «Circo en la aldea» (1969), entre muchos otros.

La elección del violinista como símbolo del destino hebreo revela agudeza. En el torbellino de la historia, el judío personifica a aquel que se esfuerza por destilar armonía a pesar de su precaria ubicación en la cúspide de un tejado, habilidad que exige equilibrio e inveterado optimismo.


Joseph Stein adaptó la obra de Scholem Aleijem, «Tevie y sus hijas» o «Tevie el lechero» (1894), y rescató dicha imagen para concebir su recordado éxito musical: «El violinista sobre el tejado».

Esta obra representa la primera incursión de las célebres comedias musicales en temáticas serias, como la persecución y la pobreza. Aborda las penurias de los hebreos en el shtétel de Anatevka durante la Rusia zarista de 1905, así como las dificultades de Tevie, su esposa Golde y sus cinco hijas para preservar la tradición en un mundo que experimenta cambios vertiginosos.


Los decorados se inspiraron en el mundo pictórico de Chagall. Batió todos los récords de permanencia en Broadway con más de 3000 representaciones y tardó nada menos que diez años en ser superado, esta vez por el musical "Grease".

Posteriormente, en 1971, llegó la versión cinematográfica de Norman Jewison, que recibió tres Óscar y ocho nominaciones.



miércoles, 22 de noviembre de 2023

La leyenda de Zaida



Ayer hacíamos referencia a esta leyenda que, por casualidad, leímos en París. Sí, es verdaderamente extraño que la figura del rey poeta y su hija se me manifestaran tan lejos de aquí. Es una leyenda bastante desconocida y que no figura en los libros locales.

Zaida fue hija de al-Mutámid, casada muy joven con al-Ma´mún, rey de la taifa de Córdoba.

Sucedió entonces lo de la invasión almorávide, tomando Málaga y Granada con asombrosa rapidez. Curiosamente, el enemigo venía del sur y no del norte, dada la extraordinaria amistad que mantenían al-Mutámid y Alfonso VI.


Los almorávides avanzaron hasta tomar Córdoba, un 26 de marzo de 1091; la lucha fue encarnizada en la que al Ma´mún cayó defendiendo la plaza y en la que los almorávides le cortaron la cabeza; se cuenta que entraron en Córdoba con la cabeza por bandera. Zaida se refugió en el castillo de Almodóvar del Río.

Al-Mutámid, el último rey de la taifa sevillana, perteneciente a la dinastía Abbadí, sabía que sin ayuda no podía defender el Sevilla, por lo que mandó pedir socorro al rey Alfonso VI. Este mandó un ejército, al mando de Álvar Falez, hacia Almodóvar del Río, con la intención de cortar el paso hacia Sevilla a los almorávides.


Tras una feroz batalla, consiguieron sacar a Zaida y trasladarla a Toledo. Derrotado al-Mutámid, Zaida intentó salvar y trasladar a Toledo lo más selecto de los conocimientos y las artes que por entonces se daban en Sevilla, por lo que la corte castellana se llenó de poetas y músicos, cuestión que levantó recelo entre los nobles castellanos.

Enamorado hasta los huesos, el Rey la tomó por consorte, iniciando una hermosa historia de amor. Era bajita, de gran temperamento y dada a las artes, elegante como solo puede ser la hija de un rey. Hermosa como las flores y de ojos verdes; Eso nos cuenta la tradición.


El Rey había estado casado al menos tres veces, pero ninguna de sus esposas le había dado un varón. Zaida concibió a Sancho, lo que hizo tirarse de los pelos a la nobleza castellana. Entonces Zaida, por amor, se hizo bautizar en Burgos tomando el nombre de Isabel.

Mientras estuvo en el trono, el reino prosperó, hasta que, con catorce años y ocho meses, su hijo Sancho fue traicionado en la batalla de Uclés. Sancho era el heredero y estaba destinado a gobernar León, Castilla, Galicia y Portugal. Si Sancho hubiera llegado al poder, era obvio que su sangre andalusí se hubiera mezclado con la castellana y; ¡Dios nos pille confesados!

Dicha situación levantaba un polvorín entre una nobleza que jamás consentiría dicho desatino, razón por la que planearon el asesinato de Sancho en plena batalla. Mientras, y sin que jamás llegase a enterarse del asesinato de su hijo, fallecía la princesa Zaida debido al parto de una niña. La leyenda nos dice que tenía treinta y cuatro años de edad.


Al quedar el rey Alfonso VI sin su hijo, la herencia del reino pasó a su hija, Urraca I de León. Las posteriores desavenencias matrimoniales de Urraca con su marido, el rey de Aragón Alfonso I el Batallador, originaron luchas internas que retrasaron la reconquista y dieron pie al nacimiento de Portugal, al pretendiente Teresa convertirse en reino el condado que heredó de su padre.

Hoy, los restos de Zaida se encuentran en el monasterio de Benedictinas de Sahagún en León, junto con los de Alfonso VI.

lunes, 20 de noviembre de 2023

Hans Christian Andersen, ese Patito Feo

 


«Soy un alma extraña, un alma solitaria, que no encuentra su lugar en el mundo».

Hans Christian Andersen nació el 2 de abril de 1805 en Odense, Dinamarca. Su padre, Hans Andersen, era un zapatero y su madre, Anne Marie Andersdatter, era una lavandera. La familia era muy pobre y Andersen tuvo que trabajar desde muy joven para ayudar a su familia. Andersen fue un niño solitario y sensible. Soñaba con ser un gran escritor, pero su familia no podía apoyarlo, dada las carencias que esta padecía.

Sus compañeros de clase lo acosaban por su apariencia física y su condición social. Esto le causó un gran trauma, que lo marcó para el resto de su vida. Fue un niño que sufrió Bullying (acoso escolar). La infancia de Andersen fue difícil y traumática. Esto le dio una perspectiva única sobre la vida y la importancia de la lucha por salir adelante y realizar sus sueños. A pesar de las dificultades, Andersen nunca perdió la esperanza de cumplir sus sueños. A los 14 años, se fue a Copenhague para estudiar teatro. Allí, conoció a algunas personas que lo apoyaron en su carrera literaria.


El cuento «El patito feo» se publicó por primera vez en el libro «Cuentos para niños», que se publicó el 2 de abril de 1835. El cuento fue el primero del libro, y el primer cuento que Andersen escribió de los 156 cuentos que escribió a lo largo de su vida. De ahí la importancia del mismo.

El cuento cuenta la historia de un patito que es rechazado por su familia y por todos los que lo conocen; le acusan de ser feo y diferente a los demás. Sin embargo, el patito feo nunca pierde la esperanza de encontrar su lugar en el mundo. Al final del cuento, el patito feo se transforma en un hermoso cisne, lo que representa la victoria de la belleza interior sobre la apariencia física.


«El patito feo» es uno de los cuentos más populares de Andersen y se ha traducido a más de 125 idiomas. El cuento ha sido adaptado para el cine, la televisión, el teatro y la música.

Andersen era un hombre de apariencia frágil y poco agraciada, pero su talento y su sensibilidad le valieron el reconocimiento y el amor de todo el mundo. Él era consciente de su origen humilde y su falta de estatus social. Del mismo modo, el patito feo se siente diferente de sus hermanos y otros patos. Luchó por encontrar su lugar en la sociedad, especialmente en círculos literarios y aristocráticos. Esta búsqueda de identidad y aceptación podría haberse reflejado en la trama del patito feo, que busca su verdadera identidad y anhela ser aceptado.


Andersen anhelaba el reconocimiento y el éxito como escritor. En «El patito feo», el protagonista experimenta una transformación física y emocional antes de ser finalmente reconocido y aceptado. Esta transformación podría reflejar los propios deseos nuestro escritor.

Hans Christian Andersen era alto, delgado y de nariz prominente. Aparentaba una apariencia física que no necesariamente se alineaba con los estándares de belleza de la época. Además, tenía algunas características faciales que podrían haber influido en su percepción de sí mismo como menos atractivo en comparación con los demás. Debido a su apariencia física y la posible extorsión social que pudo haber experimentado podrían haber contribuido a la creación de personajes en sus cuentos que luchan con la aceptación y la identidad, temas que son recurrentes en sus obras.


El síndrome del patito feo refleja, una autoestima dañada, falta de seguridad frente a la propia imagen y necesidad de ser invisible para la sociedad. Estos son solo algunos de los rasgos de las personas que padecen este trastorno de la percepción. Es un trastorno de percepción limitante que distorsiona la imagen física de quien lo padece y le aísla del entorno.

El cuento aborda la importancia de aceptarse a uno mismo y encontrar la verdadera identidad, incluso cuando se es diferente de los demás. Este tema refleja la necesidad humana de pertenencia y la lucha por encontrar aceptación en la sociedad.


A medida que el patito feo crece y se transforma en un hermoso cisne, el cuento destaca la idea de que las personas pueden experimentar un cambio positivo y un crecimiento personal a lo largo del tiempo. Esto podría ser interpretado como un mensaje de esperanza y superación personal. El cuento aborda el tema de la belleza interior y cómo las apariencias externas no reflejan necesariamente el verdadero valor de una persona. Esta lección es transmitida a través de la transformación del patito feo en un hermoso cisne.

A pesar de enfrentar el rechazo y la adversidad, el patito feo muestra resiliencia al continuar su viaje hasta encontrar su verdadero frente al rechazo ajeno. Este tema destaca la importancia de la fortaleza emocional ante los desafíos de la vida. El cuento invita a la reflexión sobre la empatía y la comprensión hacia aquellos que son diferentes. La transformación del patito feo fomenta la idea de mirar más allá de las apariencias y comprender la singularidad de cada persona.


«Soy como un pájaro que ha nacido en la jaula 
y nunca ha visto el cielo».

martes, 14 de noviembre de 2023

La exposición más extraña del mundo.

 


En 1946, tres artistas del norte de Francia exhibieron sus obras en una exposición colectiva en una galería de París. A todos ellos les unía una vocación tremendamente pasional, que los llevó a abandonar sus empleos para consagrar el resto de sus vidas al arte. Sin embargo, su forma de trabajar era inusual: afirmaban que eran guiados por voces que les hablaban en sus cabezas.

Fleury-Joseph Crépin

La exposición colectiva de Augustin Lesage, Victor Simon y Fleury-Joseph Crépin tuvo lugar en la Galerie de la Jeune Peinture en París, del 10 al 25 de mayo. La exposición fue organizada por el crítico de arte y coleccionista Jean Cassou, quien tenía como objetivo presentar a los tres artistas a un público más amplio. Estos artistas son conocidos por ser representantes del arte marginal o art brut. Término francés que se refiere a obras creadas por artistas autodidactas, al margen de las corrientes artísticas convencionales. Término acuñado en 1945 por el artista francés Jean Dubuffet para referirse al arte creado por personas ajenas al mundo artístico, sin una formación académica. 


Victor Simon

Según Dubuffet, el art brut es una expresión artística pura, sin contaminar por la imitación de modelos ya establecidos. Los artistas, pueden ser autodidactas, personas con discapacidades mentales o físicas, o personas que han sido excluidas de la sociedad por algún motivo.


Agustín Lasague

Augustin Lesage era un minero que trabajaba en las afueras de Lille. Comenzó a pintar a la edad de 35 años después de recibir un mensaje de espíritus durante una sesión de espiritismo. Sus obras suelen ser intrincadas y detalladas, a menudo caracterizadas por patrones geométricos y simétricos. Un día, mientras trabajaba, escuchó una voz que le dijo: "Algún día serás un gran pintor". Lesage comenzó a pintar siguiendo las instrucciones de la voz, que le guiaba las manos. Sus cuadros eran abstractos y coloridos, y no tenían ningún significado aparente.


Victor Simon

Victor Simon era un obrero de la construcción que comenzó a pintar en la década de 1920.  Era un hombre que desde niño había tenido visiones. Las voces que escuchaba le decían que la pintura era un vehículo sagrado y milagroso que podía salvar el mundo. Simon pintaba cuadros figurativos, que representaban escenas religiosas o simbólicas.


Fleury-Joseph Crépin

Fleury-Joseph Crépin  un plomero del puerto de Calais. A los sesenta años, escuchó una voz que le dijo: "Una vez hayas pintado trescientos cuadros, la guerra terminará ese día". Crépin comenzó a pintar cuadros geométricos, que numeraba meticulosamente.


La historia de estos tres artistas es fascinante y enigmática. Es difícil saber si realmente eran guiados por voces sobrenaturales, o si simplemente eran personas con una imaginación desbordante. Sin embargo, su obra es innegablemente poderosa y conmovedora, y nos invita a reflexionar sobre el papel del arte en el mundo.


Victor Simon

Los tres artistas pueden ser vistos como visionarios que intentaron crear un mundo mejor a través de la pintura. Sus obras pueden interpretarse como una metáfora de la lucha por la paz y la libertad, y su estilo artístico puede considerarse una forma de expresión espiritual.