martes, 22 de diciembre de 2015

El Sistema Creador por Héctor Fiorini



La Fotografía es de Desiree Dolron 

En la obra de Héctor Fiorini se clasifica el proceso denominado por él como "Sistema Creador"

Consistiendo dicho proceso en los nexos simbólicos que dirigen a la persona desde el vacío existencial, la nada, o los elementos insondables a una culminación plena del acto creativo. Siendo más que interesante la aportación clasificatoria desde donde Fiorini, establece cuatro fases progresivas para el desarrollo y conclusión de la explosión y culminación de la obra creativa.


La Fotografía es de Adeline May



1 - Fase de exploración; se desarman los objetos dados y se instala un caos creador. Este caos es necesario para trabajar la nada, el vértigo, la experiencia de lo imposible. El sujeto se instaura en un espacio de pérdida, de desidentificación, de operaciones destituyentes. Pero esas operaciones destituyentes son, a un nivel inconsciente, parte de un trabajo activo por cuya vía el sistema coloca al sujeto creador en su lugar, en un estado de disponibilidad.

2 - Fase de transformaciones, de producciones de forma, de nuevas formas. Con este riesgo de caos, se abre la posibilidad de construir nuevos objetos, nuevas formas y relaciones, constituir lo posible como alternativa a lo real, y en este lugar de lo posible, hacer brotar una nueva realidad. El Ser.

3 - Fase de culminación de esa etapa de búsqueda.

4 - Fase de separación, que se hace necesaria para continuar un destino de creación. Una vez constituido el objeto de creación (un cuadro, un dibujo, un poema...) el objeto ya se autosostiene y quien trabajó en la creación de ese objeto ya puede alejarse. Por ello la creación también nos lleva, en su culminación, a procesos de duelo.



Es obvio pues que la primera disposición para el arteterapeuta será conducir a la persona a esa disponibilidad creativa. Desde la confianza, desde la apertura y la seguridad que ofrece el espacio terapéutico; hacia la capacidad de riesgo y de atrevimiento, de pérdida a su vez con los elementos primigenios que impiden una actualización espontánea de los recursos de respuesta.
Define Fiorini hermosamente ese "Estado de disponibilidad" que nos capacita para realizar nuestra creación en un espacio y en un tiempo suspendido...


Obra de Zhan Daqian

jueves, 17 de diciembre de 2015

Hablar con el Espíritu del Árbol




«Entre el hombre y árbol hay un imperceptible vínculo vital
 que une sus destinos».

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El árbol siente el sol, la noche, la lluvia, el viento, el calor y el frío, y hasta percibe a los pájaros que se cobijan bajo sus ramas. ¿Cómo no nos va a sentir a nosotros? El árbol se encuentra emitiendo energía permanentemente, de la cual podemos beneficiarnos.
Por lo cual os proponemos este sencillo ejercicio:

 «Hablar con el espíritu del árbol»


1- Camina entre los árboles y escoge alguno que te llame la atención.

2- Acércate a él, obsérvalo y capta su energía, no trates de analizarlo mentalmente o de establecer un vínculo emocional. Sólo nota su tono vibratorio.

3- Tócalo al mismo tiempo que cierras los ojos, con tu mano izquierda. Reconoce su fuerza y su influencia en el entorno. Observa si es un árbol solitario o un pastor de árboles que tiene influencia sobre el colectivo. Capta si su energía es curativa, o si es protectora y amorosa, o si es sabia, o si es imponente en todo ese territorio o de cualquier otro tipo. Acepta esa energía sin más y pregúntate si deseas recargarte a ti mismo con esa fuerza.

4- Establece contacto con la energía del árbol mediante tu corazón energético. Vacía tu ruido interno, fluye en el amor y escucha al árbol. Capta su espíritu. Preséntate con tu nombre y entra en un espacio donde la comunicación es energética y no sonora. Puedes pedir consejo sobre cualquier situación que necesites, cargarte de energía, relajarte o aceptar su sabiduría.

5- Escucha la respuesta en tu corazón, da las gracias, levántate y despídete poniendo tu mano derecha sobre su tronco.

lunes, 14 de diciembre de 2015

Captar la Energía del Árbol



«Se define la salud, desde un punto de vista fisiológico, como el funcionamiento armónico de las partes del organismo. Como la interrelación y el ambiente que lo rodea. El concepto ecológico de salud interpreta la enfermedad como desarmonía funcional del hombre con su ambiente».

La ciencia también prueba que abrazar árboles es bueno para la salud;

En el libro de Matthew Silverstone, Blinded by Science se señala que algunos de los beneficios que otorgan los árboles son sus efectos sobre las enfermedades mentales, el Trastorno de Hiperactividad por Déficit Atencional, los niveles de concentración, el tiempo de reacción, la depresión e incluso su capacidad de aliviar los dolores de cabeza.

De acuerdo a diversos estudios citados en el libro, los niños muestran efectos fisiológicos y psicológicos extremos en términos de «mejora de la salud» y «bienestar», cuando interactúan con las plantas. Se registró que los niños funcionan mejor cognitiva y emocionalmente en entornos verdes y tienen una mayor creatividad en áreas verdes. Esto ocurre porque cuando tocamos un árbol, su patrón energético afecta los procesos biológicos que ocurren en nuestro organismo, haciendo que se alineen, para promover la auto sanación.


«Nuestros antepasados buscaban un árbol para abrazarse a su tronco, cuando se sentían angustiados o cargados de problemas. Por el tronco fluye la savia que da energía directamente de la tierra».

En las técnicas orientales, hay una postura que se llama abrazar el árbol. Esta posición estática alinea todos los huesos del modo más eficaz posible. Para los occidentales puede parecer algo ridículo, sin embargo, cada vez más naturópatas lo recomiendan. Es una forma gratuita de sentirse en comunión con la naturaleza. Cuando caminamos entre los árboles en un parque o un bosque, podemos llegar a sentir la energía que desprenden.

Los celtas creían que cada árbol poseía un espíritu sabio y que sus rostros podían verse en la corteza de sus troncos y sus voces escucharse en el sonido de las hojas moviéndose con el viento.

Los árboles nos ayudan a establecer contacto con el poder de la naturaleza, nos dan herramientas para sanarnos, relajarnos, fortalecernos, cargarnos de energía vital y son portadores de los mensajes de la madre Tierra. Existen cada vez más personas que han comprobado los beneficios de abrazar los árboles. Al revés que con las personas que al abrazarlas podemos notar pérdidas de energía debido a factores emocionales, con un árbol siempre notaremos que nos carga, nunca que nos descarga.

No olvidemos que todo ser vivo es energía, y al igual que nosotros, los árboles tienen la suya propia, muchas veces entramos en sintonía y sentimos como fluye expresando nuestra sensación de bienestar, tranquilidad, serenidad, etc.


¿Cómo captar la energía de los árboles?

La energía que emanan los árboles, al igual que la nuestra, es invisible al ojo físico, es lo que llamamos el aura, muy perceptible sensitivamente. El árbol al igual que las personas está emitiendo vibraciones energéticas constantemente y son perfectamente asimilables por el ser humano, se pueden absorber y podemos beneficiarnos de sus efectos.

Hay formas fundamentales de captar la energía de los árboles:

A través de la energía del árbol: Su extensión es más o menos grande según las características de cada árbol y su situación ambiental. Bastará penetrar en su radio de acción. Este tipo de energía se absorbe con el simple hecho de pasear por un bosque, conscientemente podemos aumentar su captación regulando nuestra respiración a un ritmo tranquilo y algo profundo.

En la práctica, esto lo podemos hacer:

Camina entre los árboles y escoge alguno que te llame la atención.

Acércate a él, obsérvalo y capta su energía, no trates de analizarlo mentalmente o de establecer un vínculo emocional. Sólo nota su tono vibratorio.

Tócalo al mismo tiempo que cierras los ojos, con tu mano izquierda. Háblale y pídele permiso para absorber parte de su energía. Reconoce su fuerza y su influencia en el entorno. Observa si es un árbol solitario o un pastor de árboles que tiene influencia sobre el colectivo. Capta si su energía es curativa, o si es protectora y amorosa, o si es sabia, o si es imponente en todo ese territorio o de cualquier otro tipo. Acepta esa energía sin más y pregúntate si deseas recargarte a ti mismo con esa fuerza.

Establece contacto con la energía del árbol mediante tu corazón energético. Vacía tu ruido interno, fluye en el amor y escucha al árbol. Capta su espíritu. Preséntate con tu nombre y entra en un espacio donde la comunicación es energética y no sonora. Puedes pedir consejo sobre cualquier situación que necesites, cargarte de energía, relajarte o aceptar su sabiduría.

Escucha la en tu corazón, da las gracias, levántate y despídete poniendo tu mano derecha sobre su tronco.

sábado, 5 de diciembre de 2015

El Ciclo de las Necesidades de Moreau



Frida Kahlo
Las Dos

En el clásico "Gestalterapia" de Moreau se menciona el Ciclo de las Necesidades. 

Repasándolas anoche percibí la necesidad de plasmarlas por escrito, de darle forma y dibujarla en este "Aquí y Ahora"; puede que como necesidad de que estén presentes entre este alarde de colores y tecnología moderna, en este escaparate lumínico e intimo a su vez, que ofrezco con lo que va llegando; perdón lo que me va llegando. 

Un intento de dotar la herramienta ofrecida por Fritz Perls para este fondo que es "Mi casa del árbol"; por favor sin pretensión alguna por mi parte. Tan solo expresar la necesidad de que estoy aquí, vivo; respondiendo y comunicando con las armas que a uno le llega. 

Estar simplemente "Aquí", con cuanto de bueno le sucede a uno.



1. La Necesidad de Amar y ser Amado.

Es la necesidad a la que normalmente se le concede más importancia. Abarca campos muy extensos: necesidad del amor de Dios, del prójimo, amor paterno, amor sexual; necesidad de ser estimado y querido, necesidad de recibir o dar ternura...

Es esencial, desde el nacimiento, ser deseado, recibir cariño, caricias. En la adolescencia, las necesidades sexuales deben atenerse a las limitaciones impuestas por la sociedad. Los adultos sufren con frecuencia soledad y falta de amor. En el matrimonio se busca satisfacer la necesidad de amar y se amado, al mismo tiempo.

"Distingo tres etapas en la evolución de la sexualidad y de la pareja:

Búsqueda.- desde la pubertad hasta los veinte o veinticinco años. Tras el descubrimiento del auto placer y la tendencia homosexual, llega la heterosexualidad.

Fusión o simbiosis.- Coincide con la llegada del matrimonio. El interés se centra en el otro. Se quiere hacer todo juntos. Este periodo se extiende hasta los cuarenta o cincuenta años y abarca el tiempo dedicado al crecimiento de los hijos.

Autonomía.- La tendencia a la unión amorosa disminuye y se atenúa hasta desaparecer de lo cotidiano. Es una época de replanteamientos: ¿fidelidad?, ¿nuevos proyectos?

Se le ha llamado la segunda adolescencia pero no como una vuelta al pasado, sino de una nueva dirección hacia una mayor autonomía en la vida sexual, como cuando a los veinte se separaba de los padres. Ahora lo primero no es la pareja..."


2. La Necesidad de sentirse útil a alguien o para algo.

Es una necesidad más satisfecha que la anterior; la madre con los hijos, el trabajador, etc. Y al mismo tiempo sufren más esta insatisfacción los que han vivido más para otros que para su propia persona.

Esta actitud lleva consigo centrarse en las exigencias de los demás


3. La Necesidad de realización y Autonomía.

Feliz el que llega a realizarse sin dominar ni sublevarse, porque, en caso contrario, sería dueño o esclavo de los demás. Estos dos últimos casaos generalmente no logran su satisfacción.

"No quiero cambiarte. 
Tú sabes mejor que yo lo que te conviene".

"No quiero que me cambies. Quiero, de verdad, 
que me aceptes y respetes mi forma de ser".

"Así, podremos establecer una relación rica, 
basada en la realidad y no en el sueño".

Susan Polis Shultz

4. La Necesidad de Seguridad

Es la necesidad de sentirse protegido contra la adversidad. esta necesidad está cubierta, generalmente en nuestros países(hambre, frío, empleo, vivienda, seguridad social).

La palabra "seguridad" se emplea en todos aquellos contextos donde pudiera haber inseguridad.

La búsqueda de la seguridad a cualquier precio puede resultar agobiante si nos lleva a una existencia monótona, de costumbres encasilladas. A fuerza de evitar los imprevistos, se corre, el riesgo de desperdiciar la vida. 

5. La Necesidad de Libertad.

La considero opuesta a la anterior. Muchos se creen libres y, en realidad, soportan una esclavitud de la que no se pueden dar cuenta. No hay nadie completamente libre. El que quiera ser libre debe evolucionar y evitar la anarquía y la rebelión. El que tenga miedo corre el riesgo del conformismo y la sumisión. 

"Los valientes no quieren que se siga otro camino que no sea el suyo"

Georges Brassens

Puedo elegir entre renunciar a la libertad o decir que no a lo que piensan los demás.

En este punto ya empieza a aparecer el sufrimiento.

Satisfacer esta necesidad es algo arduo y difícil. El "¿qué dirán?" no es siempre una limitación exterior, sino es más frecuente que sea interior: "¿qué diré yo?"


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