domingo, 24 de enero de 2021

Cuando Hitler mandó quemar «Bambi»

—¡Mira, mira, mamá! —exclamó de pronto Bambi—. ¡Una flor volando! 

—No es una flor —explicó la madre

es una mariposa.


Aunque esta os parezca una historia insólita y extraña, sucedió así, tal como os la voy a contar… 


En 1923, el poeta, Félix Salten, tras visitar los Alpes suizos, se interesó por la vida salvaje y los animales, decidiéndose por escribir una novela. La primera edición fue muy limitada y contaba la historia de cómo un ciervo tenía que sobrevivir en el bosque desde su nacimiento. 

Salten nació en 1869 en Budapest (Hungria), y debido a la legislación que otorgaba la ciudadanía a los judíos en Austria, la familia de Salten se trasladó a Viena. Su verdadero nombre era Siegmund Salzmann, siendo conocido mundialmente bajo el seudónimo de Félix Salten. 

El joven Salten, tuvo que dejar de estudiar y ponerse a trabajar muy joven, aprendiendo a sobrevivir, dado las carencias económicas de la familia. 

Su pasión por la escritura le llevó a presentar artículos cortos, reseñar libros en revistas y otras publicaciones. Creo y formó parte del movimiento joven de Viena, una sociedad de escritores que se reunían regularmente en los cafés de la ciudad, sobre todo en el café Griensteidl. 

Salten publicó su primer libro en 1900, por entonces ya trabajaba como critico artístico y teatral para la prensa de Viena. Sus columnas, guiones, libretos para obras de teatro y películas lo convirtieron en un personaje muy famoso. 

En 1927, fue elegido Presidente de la Sociedad de Escritores de Viena, una organización comprometida con la buena voluntad entre los escritores. Siendo en ese mismo año cuando la novela «Bambi» fue publicada, traduciéndose prácticamente en todo el mundo. 

En 1933, Disney compró los derechos de la obra de Salten, pero no sería hasta 1942 cuando la película fue comercializada. Pero por entonces, la vida en Austria se había transformado, resultando bastante peligrosa para un judío tan famoso como Salten.


La madre siguió caminando tranquilamente. Bambi la siguió. 

Se había quedado mudo, preguntándose qué podía significar “pronto”. 

Y llegó a la conclusión de que “pronto” no era lo mismo que “ahora”. 

Pero en cambio no estaba seguro de cuándo “pronto” 

dejaría de ser lo que era para empezar a ser “hace mucho tiempo”.


El partido en el poder nazi, prohibió el libro y organizó su quema en todos los estados. Para el partido nazi, la novela «Bambi» significaba una alegoría política sobre el tratamiento de los judíos en Europa, además de una muestra de debilidad del hombre frente a las emociones. Por lo que Salten paso a ser perseguido ante la publicación de «tan peligrosa obra». 

Aparentemente Walt Disney era completamente inconsciente de los fundamentos alegóricos de la historia. Rehaciendo la historia y naturaleza de los personajes, dado que la industria norteamericana se hallaba más preocupada en la manera de tratar la fábula destinada a un público meramente infantil. 

Aún con la transformación de la película, esta conserva la pasión y melancolía propia de los personajes de Salten. La fuerza de la novela y sus personajes es tal, que, en algunos círculos americanos, se relacionó con el ataque a Pearl Harbor y con la pérdida de la inocencia de América. 

Aunque hemos de reconocer que la película, dista mucho de la novela original, dado el carácter filosófico del libro, esta supone un verdadero manual de supervivencia para tiempos difíciles. El bosque, escenario natural muestra un mundo salvaje y en el que especies de todo tipo conviven. Todas ellas luchan por sobrevivir y entre ellas se establecen diferentes lazos de armonía y amistad. 

Los ciervos son los judíos que tienen que enfrentarse al hombre, su enemigo natural. La novela evoca la experiencia de la exclusión y la discriminación. Son los ciervos los que cuentan a sus hijos relatos de horror y miseria. 

Pocos ciervos creen que vivir en armonía con los seres humanos sea posible y los pocos que lo creen terminan siendo asesinados por los cazadores. 

El ciervo aparece en muchas metáforas en el arte medieval. Las liebres y las cacerías de ciervos en los textos judíos se refieren al antisemitismo en la Biblia también aparecen ciervos formando parte de símbolos, como el símbolo de Neftalí (Lucha).


—Mamá, ¿por qué estaban enojados esos dos? 

—Disputaban por cuestión de la comida 

—contestó ella. 

—¿Disputaremos nosotros alguna vez por esa misma causa? 

—No —aseveró la madre. 

Bambi prosiguió: 

—¿Por qué no? 

—Porque siempre hay comida suficiente para nosotros.


Salten huyo a Zúrich (Suiza), falleciendo en 1945. Pero antes de morir, tuvo la oportunidad de ver la película de Disney, la que le agradó enormemente. 

Al finalizar la guerra, los libros quemados de Salten renacieron de las cenizas, «Bambi» ganó la batalla, mostrando a las generaciones venideras que, aunque las circunstancias sean realmente adversas, todo se puede corregir con la ayuda de la naturaleza, los amigos y una voluntad sin límites. 

«Bambi», nos muestra como después del largo invierno siempre llega la primavera.


—¿Mataremos nosotros también un ratón alguna vez? 

—No —replicó la madre. 

—¿Nunca? —preguntó él. 

—Nunca. 

—¿Por qué no? —preguntó Bambi, aliviado. 

—Porque nosotros no matamos nunca —dijo sencillamente la madre 

1 comentario:

  1. Es alucinante la historia real que se oculta tras la ficción. Como se suele decir, la realidad la supera. El simbolismo que guarda y las circunstancias que la rodean. Me ha encantado conocer esta historia Ricardo. Es como siempre una entrada magnífica.
    Besos :D

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